“Linimento
SLOAN” “El tío del bigote”
Mi padre
fue boxeador, y siempre había en casa una botella del tío del bigote (Linimento
SLOAN) pera los masajes.
También tuve
un maestro de pintura que en su juventud fue ciclista, y me contó que los
ciclistas de antaño usaban aguarrás puro para masajearse las piernas...
Recuerdo
perfectamente el olor que desprendía aquel líquido de la botellita del “tío del
bigote”, era...Aguarrás!!
Ingredientes: trementina 47% !!
¿Por qué se
utiliza aguarrás puro de resina de los pinos, abetos, alerces y terebintos. (Esencia
de trementina) como disolvente en la pintura al óleo, y no otros disolventes
salvo la esencia de petróleo rectificada?
Bueno, pues
porque otros disolventes son demasiado agresivos para los aceites de las
pinturas al óleo, o poco efectivos, diluyen poco, no ligan bien con el barniz Dammar…
El alcohol también
diluye, pero es muy nocivo para la pintura, pues descompone los aceites
estropeando la pintura al óleo.
En el
mercado hay también Esencia de petróleo rectificada e incluso la hay
desodorizada, que funciona muy bien y es menos grasa que la trementina,
facilitando por ello el secado de los óleos, pero es, al igual que la esencia
de trementina rectificada, un producto bastante caro.
En tiendas
de pintura industrial se pueden encontrar disolventes que huelen muy bien, a
naranja, a limón… oler, olerán muy bien, pero tóxicos son igual y más que
cualquier otro disolvente, es más, los disolventes cuanto mejor huelen más tóxicos son, y el perfume no es otra cosa
que el disfraz de un mal producto, como la “salsa” que disimula el mal olor de
pescado pasado en un mal restaurante.
¿Aguarrás puro
y barato?… no existe.
¿No existe?
Pero si los hay en todos los súpers e hipermercados!!... Que No, no existe…
Por desgracia
hay una “norma” del “mercado común europeo” que permite denominar “aguarrás
puro” a todo aquel producto que contenga 55% de aguarrás y 45% de cualquier
otro disolvente, por malo y nocivo que este último sea…esto es algo que poca
gente sabe, y causa de muchos problemas como las alergias.
Así que hay
que asegurarse de que en la etiqueta de ingredientes del aguarrás ponga exclusivamente esencia de trementina, y
en las botellitas de esencia de trementina rectificada ponga exclusivamente: “aguarrás”
o “esencia de trementina (aceite)”
Una consideración
más, yo, tras mancharme las manos pintando no me las lavaría con otra cosa que
no fuese aquello con lo que se daban masajes los deportistas, aguarrás puro,
pero “puro” pues no conozco ningún caso de nadie que enfermara por masajearse
con ungüento “El tío del bigote” y en los casos de reacciones al aguarrás que
he conocido, siempre que he preguntado me han confesado que usaban aguarrás del
supermercado, ese que tan económico resulta y pone que es “puro” por obra y
gracia del mercado común europeo.
¡de ninguna manera haría yo lo que dice este prospecto! una cosa es lavarse el aceite y otra ponerse eso en la boca!!!
Lo que cuento
a continuación no tiene que ver con el aguarrás, pero sí con las “normas” del
dichoso mercado común:
Cuando yo
era pequeño, en las tiendas había chocolate y sucedáneo de chocolate…
El sucedáneo
no era chocolate, pero se parecía bastante (más por el color que en el sabor)
el caso es que la entrada en el mercado común vino con una “norma” por la que se
puede llamar chocolate a cualquier cosa, y para asegurarse que se trata de
chocolate hay que fijarse en las proporciones de manteca de cacao, que ha de
ser un minino de un 40% en el caso de chocolate con leche y 70% en el puro. Todo lo demás es sucedáneo.